Nuevos hallazgos en el campo de exterminio de Teuchitlán y su posible vínculo con Colima
Al 13 de marzo de 2025, continúan las investigaciones en el Rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, identificado como un centro de exterminio presuntamente operado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Este sitio fue descubierto a principios de marzo por el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, quienes encontraron tres hornos de cremación clandestinos, restos óseos calcinados y aproximadamente 400 pares de zapatos, además de prendas de vestir, carteras e identificaciones personales.
La Fiscalía de Jalisco ha publicado una lista de 493 objetos personales hallados en el lugar, con el objetivo de que familiares de personas desaparecidas puedan identificar pertenencias y obtener información sobre sus seres queridos. Este esfuerzo busca esclarecer la magnitud de las actividades ilícitas realizadas en el rancho y brindar respuestas a las familias afectadas.
En cuanto a la relación entre este hallazgo y el estado de Colima, es importante destacar que el CJNG tiene presencia significativa en ambas regiones. Colima, especialmente el puerto de Manzanillo, ha sido estratégico para el tráfico de drogas debido a su ubicación geográfica. Enfrentamientos recientes en Colima han sido atribuidos a disputas internas del CJNG y conflictos con células locales, como Los Mezcales, que se separaron del cártel.
Teuchitlán se encuentra aproximadamente a 230 kilómetros de la ciudad de Colima, lo que facilita la movilidad de grupos delictivos entre ambos estados. Aunque no se ha establecido una conexión directa entre el campo de exterminio y actividades específicas en Colima, la influencia del CJNG en ambos estados sugiere una posible relación en las operaciones delictivas. Las autoridades continúan investigando para determinar el alcance de estas actividades y su impacto en la región.
Este descubrimiento ha generado una profunda conmoción en la sociedad mexicana y ha resaltado la urgencia de abordar la violencia y las prácticas inhumanas asociadas al crimen organizado. La presidenta Claudia Sheinbaum ha solicitado a la Fiscalía General de la República que asuma el caso y realice una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.